En una reciente aparición en el programa de televisión Antes de Media Noche, la asambleísta Romina Salazar abordó una grave situación relacionada con
En una reciente aparición en el programa de televisión Antes de Media Noche, la asambleísta Romina Salazar abordó una grave situación relacionada con el Seguro Único de Salud (SUS) en Tarija. Salazar ha formalizado una denuncia ante el director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) debido a presuntas irregularidades en la atención médica brindada a un paciente con desnutrición crónica.
La legisladora detalló que recibió varias recetas médicas destinadas a un hombre de 45 años que, tras una operación en agosto del año pasado, ha enfrentado complicaciones severas. Este paciente, inicialmente ingresado por intensos dolores estomacales, fue diagnosticado con un intestino retorcido y sometido a cirugía. Sin embargo, la herida quedó expuesta, lo que ha contribuido a su deterioro actual.
Salazar subrayó que, a pesar de las reiteradas visitas al hospital San Juan de Dios, el paciente no ha recibido la atención adecuada ni la operación necesaria para su recuperación. En diciembre, fue readmitido, pero fue dado de alta en enero sin que se le realizara la intervención quirúrgica que requería. Sus familiares, preocupados por su estado, se vieron obligados a recurrir a la Defensoría del Pueblo y a Derechos Humanos en busca de ayuda.
La asambleísta cuestionó la negativa del hospital para llevar a cabo la cirugía, alegando que se argumentó un supuesto problema psiquiátrico en el paciente. Sin embargo, tras una evaluación, se determinó que no existían tales complicaciones y que la operación era viable.
Salazar también expresó su preocupación por la aparente falta de coordinación y conflictos internos dentro de la administración del hospital, lo que podría estar obstaculizando la atención adecuada de los pacientes. En este sentido, ha solicitado información tanto al Sedes como a la dirección del hospital sobre el caso del paciente.
Además, la asambleísta hizo hincapié en la carencia de medicamentos que deberían ser cubiertos por el SUS, obligando a los familiares a adquirirlos por su cuenta. Esta situación, a su juicio, refleja una negligencia por parte del hospital en el manejo del caso.
Salazar enfatizó la necesidad de identificar a los responsables de esta crisis de atención médica y de tomar las acciones adecuadas para evitar que situaciones similares se repitan en el futuro. No podemos permitir que se llegue a este extremo, donde se envían notas y cartas, cuando su deber es proporcionar atención médica adecuada, afirmó, comprometiéndose a seguir de cerca el desarrollo de este asunto y a defender los derechos del paciente y su familia
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