Bajo la dirección técnica de Carlo Ancelotti, la selección brasileña de fútbol inició este lunes sus preparativos para los dos últimos encuentros de l
Bajo la dirección técnica de Carlo Ancelotti, la selección brasileña de fútbol inició este lunes sus preparativos para los dos últimos encuentros de las eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial de 2026, enfrentándose a Chile y Bolivia.
La primera de las tres sesiones de entrenamiento programadas antes de recibir a Chile el próximo jueves en el emblemático estadio Maracaná de Río de Janeiro, contó con la presencia de diecinueve de los veinticuatro futbolistas convocados. Tres de ellos, Jean Lucas, Lucas Paquetá y Samuel Lino, realizaron trabajo diferenciado, priorizando su recuperación tras haber disputado partidos con sus respectivos clubes el pasado domingo.
Se espera la pronta incorporación de los atacantes Raphinha (Barcelona-ESP) y Gabriel Martinelli (Arsenal-GBR), el portero Alisson (Liverpool-GBR), y los defensas Caio Henrique (Mónaco-FRA) y Gabriel Magalhães (Arsenal-GBR), quienes completarán la plantilla.
El contingente brasileño se ha concentrado desde el lunes en la Granja Comary, el vanguardista complejo de entrenamiento de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), situado en Teresópolis, una ciudad serrana a aproximadamente cien kilómetros de Río de Janeiro. Las sesiones de preparación en Teresópolis se extenderán hasta el 8 de septiembre, fecha en la que el equipo emprenderá viaje hacia La Paz. Allí, al día siguiente, se medirá a Bolivia en el estadio de El Alto.
Entre los primeros en arribar a la concentración destacaron el prometedor atacante Estêvão, del Chelsea inglés, y el experimentado defensa Marquinhos, del Paris Saint-Germain francés. Ambos se presentaron en la Granja Comary la víspera, anticipándose incluso a la llegada del cuerpo técnico liderado por Ancelotti, que lo hizo el domingo por la noche.
La conformación de esta lista de convocados revela una estrategia de Ancelotti orientada a la experimentación. Figuras habituales del combinado nacional, como el lesionado Neymar, así como los delanteros Vinícius Junior y Rodrygo, no fueron incluidos. Esta decisión busca abrir espacio para evaluar a jugadores con menor recorrido internacional, en la antesala de la definición del plantel que disputará el Mundial.
Esta política de rotación y evaluación es posible gracias a que Brasil ya ha asegurado su pase al Mundial del próximo año. El equipo se ubica tercero en la tabla de clasificación de las eliminatorias sudamericanas, con 25 puntos, igualando a Ecuador (segundo) y a diez unidades del líder, Argentina
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