La situación actual del transporte en Bolivia y las protestas por la escasez de combustible que han llevado a una huelga nacional. La huelga nacional
La situación actual del transporte en Bolivia y las protestas por la escasez de combustible que han llevado a una huelga nacional.
La huelga nacional de transportistas en Bolivia ha generado protestas en diferentes ciudades del país, con Sucre paralizada y Santa Cruz realizando vigilia y bloqueos. La falta de combustible ha llevado a los transportistas a exigir soluciones al Gobierno de Luis Arce, mientras que en La Paz se planean nuevas medidas de protesta.
La huelga nacional de transportistas en Bolivia, convocada en protesta por el desabastecimiento de combustibles, ha tenido una acogida dispar en las distintas ciudades del país. Mientras en Sucre, la capital constitucional y sede del órgano Judicial, la paralización ha sido total con bloqueos callejeros y ausencia de vehículos en circulación, en otras ciudades como Santa Cruz, la mayor urbe de Bolivia, la protesta se ha manifestado de manera distinta.
En Sucre, los transportistas han acatado el llamado de sus dirigentes nacionales y han detenido sus actividades durante 24 horas, exigiendo al Gobierno de Luis Arce una pronta solución al grave problema de escasez de combustibles que se ha agravado en la última semana. Por otro lado, en Santa Cruz, si bien no se ha llevado a cabo una huelga, los transportistas han realizado una vigilia y bloqueos en las oficinas de la petrolera estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
En La Paz, sede del Gobierno y el Parlamento, el transporte público ha decidido no sumarse a la huelga, pero planea llevar a cabo una marcha el día siguiente desde la ciudad vecina de El Alto. Santos Escalante, dirigente de la Federación de Choferes Chuquiago Marka, ha explicado que la población ya se encuentra perjudicada por la falta de combustible y que un paro en este momento solo empeoraría la situación.
Los transportistas en La Paz trabajan solamente tres días a la semana, pasando el resto del tiempo en largas filas en las estaciones de servicio en espera de cargar gasolina o diésel. Ante esta situación, los sindicatos del transporte en el departamento de La Paz planean una marcha y posteriormente una reunión para definir nuevas medidas de protesta que no afecten gravemente a los trabajadores del sector.
Los problemas de abastecimiento de combustible en Bolivia se han intensificado en la última semana, con largas filas de vehículos que en ocasiones alcanzan varios kilómetros y cuyos conductores deben esperar horas e incluso días para poder cargar combustible. El Gobierno de Arce ha atribuido estos problemas a la falta de dólares para importar combustible, solicitando al Legislativo la aprobación de créditos externos para resolver la situación.
YPFB ha señalado que las dificultades actuales se deben a problemas climáticos que han afectado la descarga de combustibles líquidos en el puerto chileno de Arica, por donde llega parte del carburante importado por Bolivia. Para esta semana, se ha programado la llegada al país de más de 2.000 camiones cisterna con millones de litros de combustible provenientes de varios países vecinos.
La incertidumbre y la tensión persisten en Bolivia debido a esta crisis de abastecimiento de combustible, mientras los transportistas y el Gobierno buscan soluciones que permitan restablecer la normalidad en el suministro de carburantes en todo el país.
La crisis de abastecimiento de combustible en Bolivia ha generado tensiones entre los transportistas y el Gobierno, con la población afectada por largas filas en las estaciones de servicio. Se espera que la llegada de camiones cisterna con combustible provenientes de países vecinos ayude a resolver la situación.
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