Tras un extenso debate que se prolongó por más de cinco horas, el sector del transporte, junto a juntas vecinales y otros grupos implicados, llegó a u
Tras un extenso debate que se prolongó por más de cinco horas, el sector del transporte, junto a juntas vecinales y otros grupos implicados, llegó a un consenso en torno a las nuevas tarifas de transporte público. A partir del pasado jueves, se fijó una tarifa general de 2.20 bolivianos para micros y 2.50 bolivianos para taxis trufis. No obstante, algunos líderes del sector manifestaron su descontento con el acuerdo alcanzado.
El alcalde Johnny Torres destacó que las tarifas establecidas serán fijas, sin incrementos durante la noche o los fines de semana, asegurando que se trata de precios accesibles para la población. Según sus declaraciones, se rechazó la propuesta de elevar las tarifas a 3.80 o 4 bolivianos, como había sugerido el sector del transporte.
El nuevo esquema tarifario contempla tarifas diferenciadas: los adultos mayores pagarán 2.20 bolivianos, los estudiantes de secundaria 1 boliviano, los de primaria 0.80 bolivianos y los adultos mayores 1.80 bolivianos. Para los taxis trufis, la tarifa se mantiene en 2.50 bolivianos.
El acuerdo también incluye compromisos por parte del transporte público para mejorar el servicio, respetar las paradas, aumentar la frecuencia de las unidades y cumplir con los horarios establecidos hasta las 22:00 horas. Se contempla la implementación de un sistema de GPS para un mejor control del servicio.
Además, se especifica que, a pesar de posibles aumentos en los precios de los hidrocarburos en el futuro, las tarifas no podrán ser modificadas durante un periodo de cinco años a partir de la firma del acuerdo. Las organizaciones de transporte urbano se han comprometido a cumplir con las mejoras propuestas al Gobierno Municipal antes del 15 de octubre de 2024.
Para resolver conflictos, se creará una unidad municipal de contravención y conciliación, que se encargará de gestionar y solucionar las disputas relacionadas con el transporte.
Sin embargo, la Federación de Juntas Vecinales de Cercado y la Federación Universitaria Local han expresado su rechazo a las nuevas tarifas, considerándolas una imposición del Gobierno Municipal. No se descartan futuras acciones tras una asamblea general con sus bases. Eyber Tejerina, segundo ejecutivo de la FUL, indicó que se abandonaron las mesas de diálogo, ya que no se tuvieron en cuenta las opiniones de los estudiantes, y no se descartan acciones legales en respuesta a la suspensión del servicio y la implementación de estas tarifas
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