La escasez de combustible está generando serias dificultades para el sector agrícola en Santa Rosa del Sara, lo que ha llevado a los representantes de
La escasez de combustible está generando serias dificultades para el sector agrícola en Santa Rosa del Sara, lo que ha llevado a los representantes de las cuatro centrales agrarias de la región a anunciar su intención de tomar los pozos de hidrocarburos locales. Los líderes campesinos han señalado que la insuficiencia de diésel y gasolina está impactando negativamente en el rendimiento de las cosechas, en particular en los cultivos de soya, que están madurando y perdiendo granos debido a la imposibilidad de ser cosechados a tiempo.
Uno de los dirigentes subrayó que actualmente no se está logrando recolectar ni la mitad de lo que se había pronosticado. La situación se vuelve más crítica con el paso de los días, afectando a los productores y a sus familias, quienes dependen de la actividad agrícola para su sustento.
El 8 de noviembre, los representantes campesinos aprobaron una resolución que exige al gobierno una respuesta inmediata y efectiva. En esta resolución se estipula un plazo de 24 horas para que la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) aseguren el suministro semanal de 185.000 litros de diésel y 50.000 litros de gasolina para los surtidores de San Joaquín y Patujú.
Estos puntos de venta son cruciales para el abastecimiento de combustible en toda la provincia, y los dirigentes han advertido que, si no se logra una solución dentro del tiempo establecido, se verán obligados a llevar a cabo protestas, incluyendo la posible ocupación de los pozos petroleros en el municipio.
Los líderes agrarios han enfatizado que esta medida drástica es una respuesta a la necesidad urgente de combustible en una zona que es vital para la producción. Además, han informado que un grupo de campesinos se mantiene en vigilia en los pozos gasíferos en busca de una solución.
La crisis de combustible no solo repercute en la producción agrícola, sino que también tiene un impacto significativo en la economía de los agricultores. Muchos de ellos enfrentan deudas bancarias que se verán imposibilitados de pagar si no se logra completar el ciclo de producción. Sin el diésel necesario para operar las cosechadoras, los productores se enfrentan a pérdidas que podrían oscilar entre el 60% y el 70% de lo que habían proyectado.
Frente a esta situación, los campesinos han manifestado su descontento por la aparente falta de atención de las autoridades, especialmente considerando que Santa Rosa del Sara es una región rica en petróleo, pero que no logra asegurar el suministro de combustible para sus propios agricultores
COMMENTS